Situado en el Valle de Tena, pertenece al municipio de Panticosa, en el Alto Gállego, Huesca (España).  A 1.091 metros de altitud, está emplazado al borde del embalse de Búbal, justo donde las aguas del río Caldarés confluyen con las del río Gállego.

Su nombre significa “lugar en lo alto” (en alusión al pequeño altozano sobre el que se levanta el caserío).

Se cita por primera vez en siglo XIV, debido a su céntrica ubicación geográfica, en el XVII llegó a ostentar la capitalidad administrativa del Valle de Tena. Junto con Panticosa y Hoz, conformó hasta 1836 uno de los tres históricos quiñones en los que se dividía el valle. Durante muchos siglos fue conocido simplemente como “Pueyo”, adquiriendo el topónimo actual en 1857.

De su ruta arquitectónica destaca la Iglesia de San Miguel (S.XVI) el Palacete de la Viñaza y el Puente del Concellar.

En pleno corazón del  Pirineo Aragonés, dentro de la provincia de Huesca, en la comarca del Alto Gállego, siendo recorrido por el río Gállego de norte a sur.

Es fronterizo con el valle francés de Ossau, con el que se comunica a través del paso de Portalet d’Aneu. Es uno de los valles más extensos y poblados del Pirineo. Tiene una superficie de unos 400 Kilómetros cuadrados y, va desde los 600 metros de altitud en su parte más baja hasta superar los 3.000 en muchas de sus cimas (Balaitus, Gran Facha, Argualas o los Picos del Infierno).

Cuenta además con dos grandes embalses, el de Lanuza y el de Búbal.

Ofrece una completa infraestructura turística, impulsada principalmente por sus Estaciones de Esquí. Tanto las estaciones como todos y cada uno de los pueblos del valle, se han remodelado para ofrecer al visitante las máximas comodidades y servicios que faciliten su estancia.